viernes, 14 de agosto de 2009

¡La pasión por el ajedrez! (1ª parte)


Preparaba uno de los artículos sobre la vida ajedrecística del gran Bobby Fischer cuando de repente me llegó un e-mail, del ¡Maestro de maestros! del periodismo ajedrecístico español, Leontxo García (!?).



Me indicaba que estaba de vacaciones con su esposa en la Isla de La Palma y que el día 12 de Agosto vendrían a Tenerife para visitar el pico del Teide, el volcán por excelencia del territorio español, que mide 3.718 metros sobre el nivel del mar.



Querían conocerme luego en persona y propuso que nos viésemos en la tarde noche para ir a cenar.

Ni que decir tiene, que para mi fue todo un placer acudir a su encuentro.


Leontxo (Irún, 1956) fue ajedrecista de alta competición antes de optar por el periodismo. Maestro FIDE en 1981. Asiduo visitante de los más prestigiosos eventos ajedrecísticos en los últimos treinta años. Prestigioso conferenciante. Países como Argentina, Uruguay, México, Portugal o por supuesto, España, le han acogido en numerosas ocasiones como contertulio sobre diversas facetas que tienen que ver con nuestro querido juego-ciencia.


Comenzó su andadura periodística en la famosa Revista Jaque, para terminar redactando crónicas, primero en los diarios de su región, Deia, La Gaceta del Norte o Gaur.


Su figura profesional fue creciendo y pronto se disputaban sus trabajos las agencias EFE y France Presse, la propia Cadena SER, Radio Moscú o la BBC Radio.


Pero sin embargo, “cuajó” a gran nivel como corresponsal de ajedrez de El País (papel que hoy en día sigue desempeñando con tesón) y de Radio Nacional de España y más en concreto de su precioso programa deportivo titulado “Radio Gaceta de los Deportes”.


De redactor pasó a ser director de la Revista Jaque desde 1991 hasta 2001.


Toda esta aureola de valía profesional terminó funcionando hasta propiciar su colaboración esporádica con revistas y diarios de todo el mundo (!?).


Todos los grandes aficionados españoles recordamos con cariño los 39 programas televisivos emitidos en nuestro país a principios de los años 90, titulados En Jaque, en el que Leontxo actuaría como “guionista”, “subdirector” y “presentador” del mismo.


La tremenda difusión de la cultura ajedrecística propagada en aquellos brillantes programas sirvieron para que la serie fuera premiada por la Universidad de Oviedo.


Jamás tampoco olvidaremos la estupenda cobertura televisiva que gozó el llamado Mundial de Sevilla 1987 entre Kaspárov y Kárpov, que fue minuciosamente cubierto en más de 50 programas diarios.


Por si fuera poco, en una época sin Internet, los interesados pudimos coleccionar la serie de fascículos y vídeos de Ediciones Salvat, llamada La Pasión del Ajedrez que Leontxo escribió junto al gran Garry Kaspárov.


Sin lugar a dudas, este pequeño esbozo de su biografía profesional ha servido para que una prestigiosa editorial española de ajedrez que dirige el GM Alfonso Romero (Edt. Chessy), le otorgase el I Premio Nacional a la persona que más promovió el ajedrez en 2007.


Tengo que indicarles que el que les escribe estas crónicas en calidad de “aficionado amateur” ha tenido siempre en estos treinta años a Leontxo García como perfecto modelo de inspiración.


Pude dos veces a lo largo de mi vida hablar con él, pero más bien, un poquito, para saludarlo. Una fue en el Open de la GMA celebrado en Palma de Mallorca de 1987 y la otra ocasión surgió en el Torneo Internacional Ciudad de Las Palmas de 1996 (El AVRO de finales del S. XX, en palabras de Kaspárov).


El mundo de las telecomunicaciones de este S.XXI permite ahora a los “aficionados” poder acercarnos un poquito más a las estrellas del tablero y fue para mi un honor que Leontxo García quisiera pasar unas cuantas horas con mi compañía.


Me desplacé sobre las 21,00 h. al Gran Hotel Mencey, en el corazón de la ciudad, en plena Rambla santacrucera, entregado por el General Francisco García-Escámez, artífice de la magna obra, al Cabildo de Tenerife en enero de 1947.


Allí tras presentarme a su esposa Mari Carmen, persona trambién de gran valía humana, Leontxo me estuvo comentando su experiencia con la subida a la cumbre del Teide. Pude recomendarles la visita posterior (ya en horas de almuerzo) al pueblo sureño de los Abrigos, un mágico lugar característico por los buenos restaurantes de pescado fresco que posee.



Salimos del Mencey en dirección a la zona más antigua e idílica de la capital tinerfeña. Cruzamos el Parque García Sanabria, en memoria del que fuera alcalde capitalino que le dio impulso definitivo a partir de 1926; uno de los más bellos que pueden visitarse, un auténtico jardín botánico, con árboles y plantas en general de todas las especies, llegados de todos los países. Es un parque de perenne verdor, en el que los paseos, las fuentes, las esculturas, los monumentos, los estanques y los jardines, con sus más de doscientas especies vegetales, viven en perfecta armonía.


Bajamos por la céntrica calle del Pilar, en donde se construyó un templo en honor a la Virgen del Pilar a mediados del S.XVIII, para llegar a la famosa calle Bethencourt Alfonso (popularmente más conocida como la calle San José), una de las más típicas del viejo Santa Cruz, en la actualidad una vía comercial peatonal. En el número 27, en la casa que después ocupó el Hotel Camacho, vivió y murió el general Antonio Gutiérrez, vencedor de Nelson.


Llegamos de esta manera a la famosa Plaza de España, en donde en parte de su solar, que hoy ocupa una tremenda fuente natural estuvo el castillo de San Cristóbal, la más antigua y mejor dotada de las fortalezas importantes con que contó Canarias, construida en 1575 y demolida en 1930. En sus inmediaciones también se encuentra el edificio del Cabildo Insular, así como el de Correos y Telégrafos. En este espacio, ya dando también hacia la plaza de la Candelaria estuvo ubicado el Hotel Orotava, lugar donde se hospedó el 6 de Diciembre de 1945, el gran campeón del mundo Alexander Alekhine (léase Aliejin – Hans Kmoch- o tal vez Aliojin - !?, como matiza el propio Leontxo García).

Desde la plaza de la Candelaria hacia Imeldo Serís, llegamos hasta el monumento del propio General Gutiérrez. Merece la pena aquí y ahora relatar brevemente su hazaña.


Le correspondió el mando de las fuerzas militares de Tenerife que derrotaron al comandante inglés Horacio Nelson en julio de 1797.


Las medidas que adoptó Gutiérrez y las órdenes que dio fueron acertadas. Su comportamiento, caballeroso en extremo con los vencidos, encuentra difíciles antecedentes en la Historia. Firmada la capitulación, ordenó que hospitalizasen a los numerosos heridos británicos y que les dispensasen los mismos cuidados que a los españoles, al tiempo que obsequiaba a los vencedores y vencidos con ¡vino de Tenerife!. Al día siguiente, invitó a comer al comandante Troubridge y a otros marinos británicos y les entregó el parte de la victoria, que el propio Nelson se ofreció para llevar a Cádiz, convirtiéndose así en el mensajero de su propia derrota (!?).


Nos dirigimos a “rendir honores” al templo de Nuestra Señora de la Concepción, cuya esbelta torre la proyectó el ingeniero militar Antonio Samper en el siglo XVIII. Se tiene como cierto que el Papa Pío IX, antes de acceder al papado, celebró la Eucaristía en esta iglesia, en la escala del viaje que hizo en 1823 a América. En ella también estuvo Alfonso XIII, en 1906, con motivo de su visita a Canarias.


En su interior se hallan los sepulcros de importantes personalidades de la vida isleña, como los generales Antonio Gutiérrez, Antonio Benavides y Francisco José de Esparán y los obispos Félix Bernui y Bartolomé García Jiménez.


Entre los objetos notables que alberga se encuentran la cruz que traía y fijó en Santa Cruz Alonso Fernández de Lugo y la imagen de la Virgen de la Consolación transportada también por el Adelantado.



Así hasta que llegamos al típico lugar de restaurantes y zonas de tapas, ubicado en la Calle Antonio Domínguez Alfonso, antigua Calle La Noria (por las muchas que tuvo en otro tiempo, que a principios del siglo XIX era una de las calles principales de Santa Cruz.


Dispusimos de una “rica” cena en uno de sus restaurantes, con diversos platos típicos canarios, como el almogrote, el aguacate relleno, al tiempo que degustamos una rica carne, todo acompañado con pequeñas “papas arrugadas negras” de la región canaria, rematándola con una excelente tarta de plátano (!?).


Valió la pena habernos recreado, por tratarse del “ilustre” personaje de quien se trata, en estos detalles culturales de la vida santacrucera.


¿Pero, qué hablamos de ajedrez?... .


Les garantizo que nuestra charla fue simplemente “apasionante”. Pero el relato principal de la misma, la dejo ahora para la segunda crónica de esta serie.


¡No se la pierdan, amigos!.


Un afectuoso saludo,

ANGEL JIMÉNEZ ARTEAGA

aarteaga61@gmail.com


1 comentario:

Torneos de Ajedrez Puerto Rico Informa dijo...

Excelente articulo del Gran Maestro del Periodismo Ajedrecista Leontxo Garcia Olasagasti.

El leer sus artículos y su gran pasión por dar a conocer el ajedrez fue la razón principal de mi interés de crear el blog "Informador - Ajedrez Puerto Rico.

Espero al igual que pudiste conocerlo tener el placer de verle visitar a la isla del encanto Puerto Rico.

Con mucha tradición y descendencia de sangre Canaria...

George Pérez-Borrero
Tesorero
Federación de Ajedrez de Puerto Rico