Lasker, Capablanca y Alekhine o ganar en tiempos revueltos (356)
El defenestrado Nikolái Krylenko escribió el siguiente prólogo (que el régimen comunista, tras ejecutarlo vilmente, ocultó para intentar borrar su obra) al inicio de su majestuoso libro editado en relación al II Gran Torneo Internacional de Moscú de 1935 y que hoy comenzamos a restaurar en este blog en nuestro intento de "invadir" culturalmente a la <Rusia ajedrecística>:
"El II Gran Torneo Internacional de Moscú de 1935 se llevó a cabo en las condiciones de un movimiento del ajedrez soviético colosal y en continuo crecimiento y se redujo esencialmente a una lucha por la supremacía en el ajedrez entre la U.R.S.S. (Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas) y los países capitalistas. Así se planteó objetivamente la cuestión histórica y políticamente así fue entendido y percibido no sólo por nosotros, sino también por los círculos burgueses de ajedrez.
Nikolái Krylenko en aquella época.
(N.d.l.r.: La forma más rastrera que siempre ha tenido la extrema izquierda en el mundo, hoy encabezada por Vladimir Putin, es llamar "burgueses" a los demás, cuando resulta que son sus élites las que en realidad representan más que nadie a ese movimiento, eso sí, a costa del pobre pueblo que dirigen).
En los diez años que han pasado desde el I Gran Torneo Internacional de Moscú de 1925,
(Amplíe el cuadro clasificatorio, haciendo "click" sobre el mismo):
...la U.R.S.S. ha crecido tanto política como económicamente y se ha convertido no solo en un país industrial avanzado, sino también en una gran potencia internacional. (N.d.l.r.: Con la preponderancia del miedo y terror que causan las armas, jamás se podrá ser una potencia creíble). Solo por esta razón, cualquier actuación de la U.R.S.S. fuera del mundo burgués, incluido el II Gran Torneo Internacional de Moscú de 1935, no podría considerarse en el extranjero solo desde un punto de vista estrictamente deportivo. (N.d.l.r.: Aquella forma de vida comunista fracasó socialmente, mientras hoy en día el capitalismo continúa).
Para amplios círculos de la burguesía extranjera, la U.R.S.S. hasta cierto momento fue una esfinge, que de repente se convirtió políticamente en una poderosa fuerza que incide directamente en el destino del mundo. (N.d.l.r.: En la mitología griega la <esfinge> es un monstruo fabuloso representado generalmente como una leona alada con cabeza y pecho de mujer que planteaba enigmas irresolubles. Y que casualidad que Putin piense ahora exactamente igual. Pero jamás la <fuerza bruta> que él hoy representa vencerá en este mundo libre).
Desde el punto de vista específico de los ajedrecistas extranjeros, para ellos surgió la pregunta: ¿Qué es la U.R.S.S. en términos de ajedrez?. Incluso para los que no son jugadores profesionales pero sí que han oído hablar del ajedrez y de figuras tales como Lasker, Capablanca, Euwe o Flohr, surgió la posibilidad de ver lo que podía hacer aquí la misteriosa Unión Soviética.
Sólo para los <trabajadores> de los países capitalistas, la U.R.S.S. no era una esfinge, pero incluso para ellos, este torneo de ajedrez tenía que dar una vez más una respuesta a la misma pregunta histórica: ¿Quién gana?. (N.d.l.r.: El <proletariado> es una herramienta usada por las élites de extrema izquierda para, jugando con su sangre, conseguir sus objetivos de enriquecerse a toda costa. Eso se aprecia hoy con los oligarcas rusos desparramados por toda Europa, viviendo todos ellos a ¡cuerpo de rey!).
No hace falta hablar de cómo fue percibido el torneo por las amplias masas de trabajadores de la U.R.S.S., millones de ellos política y culturalmente desarrollados. (N.d.l.r.: Pero todos mal viviendo, esclavizados y privados de libertad, como sucede hoy en día con el engañado pueblo ruso).
Se esperaba que la Unión Soviética se reuniera con los maestros burgueses para ver cómo se mostrarían los nuestros y qué podía dar el <pueblo> en la lucha contra las autoridades reconocidas del mundo ajedrecístico burgués. Desde este punto de vista, observaron el curso del torneo desde su comienzo hasta la última ronda. (N.d.l.r.: Ajedrecísticamente hablando, el ajedrez en la U.R.S.S. fue bonito hasta que duró. Y aunque los "mejores" del <pueblo> tenían "privilegios", bien es verdad que preponderó desde 1948 hasta los albores del S.XXI):
(Amplíe los dos cuadrantes de los Mundiales haciendo "click" sobre los mismos):
Campeones y Campeonatos del Mundo de la F.I.D.E.
(Federación Internacional de Ajedrez).
(Continuará)
Queridos amigos nos reiteremos en nuestra frase-franquicia:
¡No a la guerra invasora en Ucrania!.
Y al mismo tiempo esperamos que el pueblo ucraniano pueda alguna vez bailar (por decir algo bonito) a lo largo de toda su vida:
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